El fraude de noviembre de 1952 confirma algo que no debemos olvidar: no basta la realización de elecciones para que haya democracia. Sin un árbitro electoral imparcial e independiente las elecciones terminan siendo un instrumento arbitrario, que no refleja la voluntad que la población expresa en las urnas.
Los micros Con Las Botas Puestas. Historias de nuestras luchas para lograr y defender la democracia, son una producción del Servicio de Información Pública en Venezuela.